Placer exquisito
Uno de los negocios con más solera y tradición de Oviedo es sin duda, Diego Verdú.
Todo comienza en 1878 cuando un joven emprendedor de nombre Diego y apellido Verdú, abandona su Jijona natal con unas cajas de turrón bajo el brazo. Decide probar fortuna y vender en Asturias, más concretamente en Oviedo, sus deliciosos dulces. A fecha de hoy sus descendientes siguen endulzando la vida de numerosos ovetenses, asturianos y todos aquellos que fuera de nuestras fronteras prueban y repiten. El placer engancha y tanta suculencia crea adicción gustativa.
La fábrica está en Jijona y allí van personalmente durante el mes de septiembre. Están algo más de un mes, seleccionando la mejor almendra, la almendra Marcona de primera calidad con la que elaboran el mejor turrón.
Su especialidad no es únicamente el turrón. Son famosas también sus almendras rellenas, polvorones, mazapanes, obleas y yemas. Si bien estos productos los consideramos sinónimos de la navidad, ellos apuestan por su venta y consumo durante todo el año. Y francamente, es una buena apuesta ¿A quién no le apetece uno de estos manjares durante el resto del año?
Frutas confitadas, bombones de turrón, de roca o con frutos secos te hacen segregar más jugos que el perro de Pavlov.
La nata montada de elaboración propia puede incluso inducir a estados de levitación. Una vez la pruebas, vives sin vivir en ti.
Mi perdición personal, es el exquisito helado de turrón.
Os invito a todos a descubrir vuestro dulce objeto de deseo. Hay tanto para degustar en:
Diego Verdú Monerris
c/ Cimadevilla, 7
33003 Oviedo (Asturias)
Página web:
En este 2014 prometen darnos más facilidades con la creación de una tienda online. Esperamos ansiosos la apertura.
